La semiología apunta a que cuando escuchamos una palabra generamos un significado o imagen sonora dentro de nuestra mente; por ejemplo, cuando escuchamos la palabra ‘manzana’, inmediatamente pensamos en aquel fruto rojo de forma redonda y sabor dulce, aunque quizá algunos imaginen una amarilla o verde. Cuando nos mencionan ‘moda’, en nuestra mente suelen aparecer algunos nombres como Chanel, Dior o Versace; o, en cuestiones más asequibles, tiendas como Zara, Forever 21 o Guess. Es entonces que parece ser que, lamentablemente, pocas veces relacionamos ‘moda’ con aquella de carácter local. Y, si lo hiciéramos, tendríamos la imagen de la Ciudad de México, Guadalajara o Puebla: ¿por qué no comenzar a imaginar aquella creada en nuestro estado, Hidalgo?
Te contaré un poco más sobre el primer acercamiento que tuve con la moda en nuestro estado; los giveaways se han convertido poco a poco en algo muy común que ver en Instagram, y qué mejor si viene por parte de una de tus tiendas favoritas. Yo ya me había percatado de una cuenta llamada Raya Concept Store, la cual acogía las prendas de varios diseñadores hidalguenses, entre ellos del ya muy reconocido Iván Ávalos, quien ha vestido a celebridades de la talla de Shakira o Thalía y es, de hecho, el creador de este proyecto. A través de sus editoriales me fui interesando cada vez más y, cuando vi que anunciaron un giveaway, no dudé en participar hasta que me cansara de comentar; afortunadamente, se convirtió en una gran anécdota para mí porque lo gané. Fui a reclamar mi premio junto a mi papá, quien he de confesar no tuvo muy buena primera impresión de la ropa ya que le parecía ‘muy extraña’. Sin embargo, cuando salí del probador con mis elecciones quedó maravillado, especialmente con la idea de ser diseños originales e hidalguenses. Y para mi fortuna, quien me atendió fue nada más ni nada menos que una de las diseñadoras: Ededna Castillo, de quien me gustaría que hablemos hoy.
Desde el momento en que dejó la Licenciatura en Arquitectura y se cambió a Diseño, Ededna ha logrado introducirse en el mundo de la moda, incluso cuando esta no era su primera opción o idea sobre lo que quería hacer con su vida. Sin embargo, no fue sino hasta su primera pasarela que se dio cuenta de lo mucho que amaba ese mundo: los fotógrafos, los compañeros diseñadores (de quienes, contrario al prejuicio que se suele tener, creaban un ambiente armonioso y cálido) y las modelos que orgullosamente portaban algo creado únicamente por ella. Además de ello, se muestra muy agradecida por su estadía con Iván Ávalos, ya que no solo le abrió las puertas a ese maravilloso mundo, sino que también la inspiró a crear su propia línea como diseñadora independiente. Y es que, aunque sí que el paso de empleada a emprendedora representó un gran reto, aquellos momentos clave en su carrera lo han valido completamente y, con su enorme carisma, me cuenta lo mucho que le han llenado el corazón. Porque logros como su portada para la revista Chic Hidalgo o la aparición de uno de sus vestidos en ELLE México, siendo este llevado por la drag queen, Margaret y Ya, en la edición de junio de la revista, pueden decirse fácil, pero cualquiera dentro de la comunidad sabe el gran trabajo que conseguirlos implica.
Y he de decirte que mi admiración por Ededna no solo se concentra en sus increíbles diseños, como su vestido oruga de la colección Spilosoma o el vestido principal de la misma, sino también por su calidez como ser humano. Si algo emociona en esta industria son las ganas y la pasión que los creadores inyectan a sus prendas, lo cual irradia inmediatamente en quien las porta, por lo que no habría de extrañarte que el día en que uses un diseño suyo sientas que una gran energía te conquista. Y es que son ejemplos como ella, Rubén Osorio o Iván Ávalos los que erradican nuestra ignorancia sobre los grandes talentos que nuestro estado acuña. Porque si bien no reciben la misma visibilidad que algunos otros diseñadores mexicanos como Francisco Cancino o Benito Santos, lo cierto es que hoy existen ya dos factores que pueden impulsarlos aún más lejos de lo que ya están: las redes sociales y el apoyo de todos los que habitamos en esta bella entidad, además de quienes se encuentran leyendo esta columna.
De modo que la comunidad del diseño de modas hidalguense ha estado haciendo su trabajo para dar visibilidad a los talentos acuñados por nuestro estado; es entonces que, como sociedad, nos corresponde apoyarlos al atender a proyectos como Raya o simplemente consumir los diseños locales. Recordemos nunca subestimar los grandes talentos que nuestro país tiene por brindar porque, ¿quién dice que no tenemos entre nosotros a los próximos Alexander McQueen o Elsa Schiaparelli?
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