Un nuevo billete de 50 pesos ha sido presentado oficialmente por el Banco de México (Banxico) este jueves como el último y más nuevo integrante de la Familia G que ya se había estado poniendo en circulación gradualmente. En el nuevo diseño ya no aparece el héroe José María Morelos y Pavón –que ahora vemos en el de 200 junto a Miguel Hidalgo– sino que está protagonizado por un peculiar personaje: el ajolote mexicano.
Alejandro Díaz de León, el gobernador del Banxico se encargó de dar a conocer la nueva pieza de papel moneda que describe de color morado y dispuesta en un formato vertical como sucede con el de denominación de 100 pesos, y al igual que este, se fabrica en polímero.
Díaz de León señala que este debut de la pieza de 50 pesos es el último integrante de la nueva serie de billetes mexicanos que el Banco de México emite para concluir con el lanzamiento completo de la Familia G, cerrando un ciclo que “comenzó hace 8 años”.
El anverso del billete es alusivo a la fundación de México-Tenochtitlán, mostrando el emblema de ese proceso histórico descrito como México Antiguo.
Por otra parte, el reverso completa el cuadro resaltando el ecosistema de ríos y lagos del centro de México, con el ejemplo de Xochimilco y sus cultivos de maíz, además del pequeño anfibio emblemático de esa región por ser endémico de México.
En la porción inferior del papel moneda se aprecia la denominación del billete en un diseño multicolor, pues la tinta camba de tonalidades desde dorado a verde según el ángulo del observador.
Presenta además dos ventanas transparentes como elementos de seguridad, pero también están los detalles en relieve que sirven para personas con discapacidad visual para que puedan identificarlo al tacto, incrementando adicionalmente la seguridad.
Entre lo que resta del 2021 y el 2022 se imprimirán en total 180 millones de estos billetes para satisfacer la necesidad de moneda de la economía mexicana, ya que esa es una función del mismo Banco de México, como señala su gobernador, esto para preservar la estabilidad monetaria mediante una apropiada liquidez, como está previsto en el mandato a la banca central.
Así la facultad exclusiva de la impresión de billetes no resulta contraproducente, pues es un órgano descentralizado, pero se halla obligado a seguir estos lineamientos para no incurrir en lo que Díaz de León calificó de consecuencias graves, tanto en lo económico como legal.
Fuente: Mi Bolsillo.com