PACHUCA DE SOTO, 05 SEP/LÍNEAS LIBRES/.- En Hidalgo, durante el 2023, de acuerdo con datos de la Secretaría de Salud estatal (SSH), las solicitudes de atención médica por consumo de alcohol y drogas revelan un impacto significativo en la población que comprende el rango de edad entre los 18 y 29 años de edad.
De manera particular, el consumo de alcohol se sigue presentando como la principal causa de atención en las unidades de salud, con un 22.7 %. Seguido, está la mariguana con el 10.4 %, la cocaína con 6.6 % y los estimulantes de tipo anfetamínico, que en conjunto representan el 30.2 %.
Estos patrones de consumo, además de constituir todo un desafío de salud pública, plantean riesgos directos para la integridad física y mental de los individuos. Están vinculados también a una serie de problemas sociales y económicos que afectan a personas y comunidades enteras.
La SSH, a cargo de Vanesa Escalante Arroyo, alineada con los programas federales, ha implementado estrategias de atención integral que buscan prevenir y mitigar el impacto de estas sustancias en la juventud.
A través de campañas de sensibilización, eventos conmemorativos y programas de tratamiento especializados, la dependencia trabaja para reducir el consumo de alcohol y drogas. Además, ofrece apoyo a quienes ya se encuentran afectados por su uso y abuso.
Estas acciones se realizan en colaboración con diversas instituciones que forman parte del Consejo Estatal Contra las Adicciones de Hidalgo (CECAH).
Conmemoraciones como el “Día Mundial Sin Tabaco”, el “Día Internacional de la Lucha Contra el Uso Indebido y el Tráfico Ilícito de Drogas” y, desde 2018, el “Día Nacional Contra el Uso Nocivo del Alcohol” comprenden actividades educativas y de sensibilización dirigidas a estudiantes, así como público en general.
Personal especializado de la SSH, actualizado en el tratamiento de las adicciones, brinda atención en los Centros Comunitarios de Salud Mental y Adicciones (CECOSAMA), ubicados en Ixmiquilpan, Tula de Allende, San Felipe Orizatlán, Huejutla, Ciudad Sahagún y Pachuca de Soto.
El modelo de atención ambulatoria, incluye intervenciones breves y programas de tratamiento que consisten en cuatro sesiones y cuatro más de seguimiento hasta un año después de finalizado el tratamiento.
En tanto que, el CEAIA de Pachuca y el CAIA de Tulancingo también ofrecen un modelo residencial de tratamiento, que consta de tres periodos de 28 días cada uno, con posibilidad de extenderlos de ser necesario.